... LA NAVIDAD

Qué bonita es la navidad. Comienza con las compras navideñas.Vas a la calle Preciados a comprar los dichosos regalos para tus familiares y tardas hora y media sin exagerar en llegar de la salida del metro a la tienda. Y cuando llegas se ha agotado el jersey que buscabas. Y tardas una hora esquibando abrigos y codos en llegar a la otra tienda. Entras y preguntas y te responden que se ha agotado la talla que buscabas. Después de otra media hora de marabunta de gente descubres que la tienda que era tu última oportunidad, la han cerrado así que entras en la única tienda que queda abierta y compras lo más hortera y lo único que queda. Seguro que le encanta. Eso, por dejar las compras para el último día.

Luego llega la cena familiar, qué divertida. Los enanos no dejan de gritar, sus padres no paran de regañarles, los mayores no cesan de quejarse. Tú intentas pasar desapercibido y escabullirte a un lugar tranquilo pero al salir por la puerta todos exclaman ¿¡Dónde vas?!, ¡¡estamos en familia!!

Ah, y que decir de la cabalgata de reyes...inolvidable. Sales a la calle y un grupo de niños situados en el portal te rocían con sprays de nieve tu abrigo nuevo. JAJAJA. Llegas a la calle principal por donde circulan los camiones y ya hay tanta gente que te olvidas de ver algo. Cuando empieza a sonar la música intuyes que ya están desfilando las chicas del cabaret. No las ves pero piensas, así medio desnudas, ¿cuántas estarán mañana con fiebre? ¿La mitad? ¿Tres cuartas partes?

A continuación viene el lanzamiento de caramelos. Juegas con desventaja porque estás situado detrás de un papá con su niño en brazos y piensas,bueno, pues intentaré cazarlos del suelo, y ves que a tu derecha está el niño pillo con el spray en la mano y a tu izquierda la abuela con el bastón. En el lanzamiento los caramelos van hacia el niño del papá. Se le caen tres. El primero se cuela por la alcantarilla. Los otros dos caen al suelo. Vas a coger el segundo pero el niño pillo rocía con el spray alrededor para que no te acerques y cuando vas a coger el segundo, la abuela te aparta con su bastón. ¡Qué feliz navidad!