03 septiembre 2008

... LAS FALACIAS

¿Por qué un político es político? Porque le importa la sociedad, se supone. Pues no. Porque si ellos realmente quisieran solucionar los problemas que nos afectan, intentarían ponerse de acuerdo para buscar la mejor solución en lugar de buscar argumentos para atacar al oponente y desprestigiarlo. En realidad les importa más su bolsillo (esto es, estar en el poder para ganar más) que el bienestar de los ciudadanos. De lo contrario sus discursos no estarían llenos de falacias, esto es, argumentos no válidos como Fulanito de su partido dijo esto incorrecto, luego su partido siempre dice burradas, Menganito actuó así luego su partido siempre se equivoca, Grefusito dijo esto e hizo lo otro luego su partido no es coherente. Debería de estar prohibido alegar errores del pasado y generalizar de conductas individuales y con estas desprestigiar al partido. Si pusieran más interés en buscar lo válido de sus palabras, aquello que puede aprovecharse y ponerse en práctica para mejorar las cosas, avanzaríamos en muchos aspectos en lugar de retroceder, como muchas veces ocurre. Ojalá algún día se den cuenta.

6 comentarios:

Jordi Porras Presa dijo...

No creo que sea desinterés por la sociedad, creo que es falta de ideas. Es la poca cercanía de algunos políticos la razón por la cual no pueden proponer nada.
El ejercicio de la política es, en gran medida, empatía. Si hay empatía se conoce al votante, por lo tanto se sabe lo que desea, con independencia de sus ideas y creencias, y si se sabe lo que desea el ciudadano el político puede proponer.
Hay que hacer un ejercicio de atocrítica y los políticos deben plantearse evitar que su labor sea lleve a cabo en un terreno árido y abrupto. De esta forma los ciudadanos podrán perder el reparo hacia la política, participar más, hacerse oir más. Está claro que es la política la que debe acercarse al ciudadano para que este se acerque a ella, y no al revés.

Jordi

Subur dijo...

Es muy fácil criticarle a los políticos que muestran falta de empatía... ¿pero empatía con quién? Con el inmigrante, el pobre de la calle, el obrero, el empresario, el funcionario, el de clase alta... ¿exactamente a cuál debería entender? Porque pensar que puede haber estado en las situaciones de todos los ciudadanos que le votan es bastante inverosímil.

Nos gusta mucho opinar de los políticos y de cómo lo hacen, pero nosotros no lo haríamos mejor…

Chas dijo...

Creo que cada partido se acerca a un grupo social, lo conoce , lo defiende y vela por sus intereses. Pero solo es próximo a este colectivo, y lejano a los demás. Sólo le preocupa resolver sus problemas y no los de los demás. No es desinterés por la sociedad, sino por la sociedad fuera de su grupo social.

Jordi Porras Presa dijo...

Hasta cierto punto es verdad eso de que los partidos se preocupan de "su grupo social".
Si, existen claros segmentos de la población que por diversas razones votan a uno u otro partido pero ¿Cuales son estos segmentos? Desde luego, en el 2008 no son los mismos que en los años de la transición ni en los primeros años de la democracia. Hace años, las clases más pudientes eran también las más ilustradas. Y esas clases eran las que tradicionalmente votaban a la derecha. ¿Es eso actualmente así? Tomando como zona de muestreo mi distrito, veo que en la zona más cara del barrio y con menor media de edad (donde están los pisos más caros, áticos...) gana la izquierda y en la zona donde tradicionalmente ha ganado la izquierda por poco (donde están los bloques más viejos, desgastados y sin ascensor) ahora gana la derecha claramente. Esto quiere decir que ninguno hace los deberes, la izquierda gana por poco en un sitio y pierde su feudo y la derecha gana el voto viejo pero no se asegura el voto joven.

Al final, la inmensa mayoría de los votantes son clase media. Es decir, personas que tienen un nivel de vida aceptable, no pasan apuros económicos pero tampoco viven en la opulencia y el lujo. Estas personas y las menos pudientes, al fin y al cabo desean lo mismo, bienestar. Tener la seguridad de que sus necesidades más básicas pueden ser saciadas. Una vez saciadas esas necesidades, seguirán pidiendo más y más como es lógico. Aquel que sabe como satisfacer las demandas es quien gana unos comicios. Pero ésto no acaba aquí, porque la satisfacción de una demanda, genera otra demanda nueva que será necesario satisfacer. Y ésto solo se consigue con empatía, es decir, poniéndose en lugar del votante.
Al político no se le critica porque ni tú ni yo ni el vecino de al lado podamos hacerlo mejor, peor o igual. Se le critica porque como político se le exige satisfacer nuestras demandas, igual que a cualquiera de vostras dos, cuando seais arquitectas, se os exigirá que la construcción esté bien hecha y a poder ser sea incluso bonita, y el que critique no os criticará porque sepa hacerlo mejor, sino porque considera que podría haber estado mejor hecho. A mi como futuro licenciado en CC Políticas se me exigirá... no sé que ponga ketchup y mostaza al que me lo pida. Alagüeño futuro el mio.

Jordi

Subur dijo...

Queridísimo Jordi, lo que te decía de si nosotros lo haríamos mejor o no que un político era porque cuando yo (a título personal) realice una obra y venga "la sociedad" a decirme si la podría haber hecho mejor o no, me gustaría a mí saber lo que sabe esa sociedad de arquitectura, lo que sabe de lo que es buena o mala arquitectura, de si es bonita o fea y de si funciona bien o no.

Porque lo triste de este país de quejicas, es que sólo te das cuenta de que las cosas funcionan o no, cuando no lo hacen, cuando te molestan, es decir, que si abres una puerta y chirría, te quejas, pero sino, no piensas "uy, qué bien funciona esta puerta".

Así es la sociedad, ve la paja en el ojo ajeno, pero no ve el jardín bien cuidado, y en caso de verlo, al no ser jardineros, por mucho que opinemos, en realidad no sabemos nada... no por ser el árbol verde está sano... lo mismo está recubierto de musgo o con un montón de insectos encima y lo único que quiere es morir.

Por eso te decía de pensar en si nosotros lo podríamos hacer mejor… para poder medir nuestras críticas.

Unknown dijo...

¿Aquel que sabe satisfacer mejor las demandas es quien gana unos comicios? Perdóname que lo dude, sinceramente creo que gana quien se sabe vender mejor. Todos pueden tener una base más o menos fuerte de tipo ideológico, pero luego llegan, y donde se supone que dicen una cosa hacen otra. Sólo hay que ver las medidas económicas tomadas últimamente, el psoe se supone que es socialista, y no sigue unas medidas precisamente de ese tipo. No creo que en ciertos aspectos los partidos representen a clases sociales, los partidos están totalmente influidos por grupos de presión, y aunque dicen que gobiernan para el pueblo, se tiende a gobernar para los intereses de unos pocos en ciertas materias.